Lucas 1,57-66. 80
La festividad de San Juan representa el pórtico de las fiestas que a lo largo del verano se irán celebrando en nuestros pueblos.
Pero, ¿qué es «hacer fiesta»? ¿Qué es lo que diferencia al día de fiesta de un día ordinario? «¿Por qué unos días son mayores que otros si todo el año la luz nos viene del sol?», se pregunta el libro del Eclesiástico.
Son bastantes los que piensan que el hombre actual está perdiendo la capacidad de «celebrar fiestas». Algunos llegan a hablar de una «civilización sin fiestas».
Lo importante es «vivir en fiesta» por dentro. Saber celebrar la vida. Abrirnos al regalo del Creador. Despertar lo mejor que hay en nosotros y que queda oscurecido por el olvido, la superficialidad, la actividad y el ritmo agitado de cada día.